martes, julio 02, 2013

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En 1882, Fritz Nietzsche recibió en su casa una máquina de escribir Writting Ball Malling-Hansen. La primera máquina de escribir que se comercializó. No era una máquina de escribir como las que conocemos, era un artefacto redondo, con los tipos móviles como "alfileres de oro" que escribían sobre una hoja de papel en una curvatura que ahora parece un tanto extraña.
La máquina hizo que Nietzsche comenzará a escribir sin tener que preocuparse tanto por el problema de vista que traía de años atrás. Su escritura comenzó a cambiar, y en la medida en la que comenzó a conocer su máquina, éste comprendió que no podría volver a escribir de la misma forma que lo hacía con el papel y la pluma.
En una carta a un amigo, le escribe: "Nuestros útiles de escritura participan en la formación de nuestros pensamientos".
Así como la bola mecánica de escritura cambió la forma de escribir de Nietzsche, nuestra forma de escribir literatura no puede seguir siendo la misma después del blogger, del twitter y de la manera tan particular que tenemos de leer a través de la pantalla.

Sigo escribiendo mi artículo sobre literatura y blog. Hay un fuerte cambio en la escritura, pero sobre todo en nuestra forma de acercarnos a un texto y leer.
Ya no leemos igual.
Leemos
así
por
partes.
Por frases cortadas. Por pensamientos rápidos.
Ideas.
Fin.

Este es el modelo de máquina que usó Nietzsche:




1 comentario:

Esponjita dijo...

Yo ya había oído sobre estas máquinas de escribir, pero me sorprendió muchísimo saber que Nietzsche había usado una. No puedo imaginarme cómo era escribir con ellas, quizás era más lento y tortuoso que a mano, y definitivamente no tan fluido como es ahora con los teclados.
A veces me pregunto si es beneficioso o dañina lo entrecortada que ha vuelto nuestra lectura twitter. Alguien que sufre tanto para concentrarse, como yo, debería alejarse de ese instrumento el mal. Pero, por otro lado, da una falaz sensación de compañía.

Gracias por irme a visitar allá. :)